La escultura Mapuche como expresión ancestral es de carácter anónimo y fueron hechas por la comunidad, como una ofrenda a la tierra, así cada una de sus obras sería repetida por la comunidad infinitas veces sin cambiar un detalle, esta expresión artística, comuníca un estado elevado sobre la cosmovisión de sí mismos y cómo es la sociedad en que viven, mientras otros pueblos como los Incas o Aztecas tenían una mirada más guerrera, hacia el sol u otros dioses, el pueblo Mapuche tiene una mirada más de hermandad, homogénea; la tierra, el clima y los grupos familiares conformaron un núcleo sólido de tradiciones y costumbres que se vinculan también con valores de igualdad y respeto, todo lo anterior sin recibir la influencia de las culturas occidentales.
Las culturas que representamos a través de este arte ancestral son dos intimamente relacionadas: Los Mapuche y Los Pitrén.
LOS MAPUCHE,
Hablar sobre el pueblo Mapuche no es fácil más aun cuando representamos de manera física muchas de sus obras de arte que han existido a través de los siglos, nos referimos entonces a un pueblo que es parte activa de la sociedad con una historia que es constantemente contada por medio de su voz, entregándonos, significados simples y prácticos por medio de estructuras secretas en sus telares, joyería o en la piedra (símbolos).
LOS PITRÉN,
Es una cultura de las más antiguas del nuestro país, Los estudiosos parecen coincidir en que Pitrén constituye la primera expresión agro-alfarera (agricultura y alfarería: figuras de barro) en el sur de nuestro país, se sabe también que mantenían un vínculo con las culturas trasandinas que tenían una cerámica muy similar, LOS PITRÉN gravaban en negativo sus cerámicas y replicaban figuras de sapos y otros animales que formaban parte de su admiración y es casi seguro que las poblaciones Mapuche más actuales ascienden desde ellas heredando la mayoría de sus prácticas, tanto como la región que ocupaban dentro del país.